jueves, 11 de febrero de 2021

La oposición ecuatoguineana pide la dimisión del primer ministro por un acto multitudinario


MALABO.- El principal partido opositor de Guinea Ecuatorial, Convergencia para la Democracia Social (CPDS), ha reclamado la dimisión del primer ministro, Francisco Pascual Eyegue Obama Asué, por participar en un acto con "miles de jóvenes" que podría suponer un peligro para la salud pública.

El encuentro en cuestión tuvo lugar en la sede del Ministerio del Interior, donde el dirigente había convocado a los estudiantes licenciados para informarles de las posibilidades de prosperar en al administración pública, según consta en la página web del propio Gobierno.

Al principio de su intervención, el primer ministro se disculpó "por la falta de idoneidad de la sala", admitiendo que la falta de un registro de inscritos impidió a las autoridades buscar una estancia "que se adaptara adecuadamente, tanto a la multitud congregada, como a las medidas de distanciamiento social requeridas" por la pandemia de COVID-19, informa el Ejecutivo.

Según el CPDS, "la sala estaba llena a rebosar y varios centenares de asistentes tuvieron que seguir la reunión desde el patio del Ministerio por falta de espacio en el interior", lo que supondría en opinión de esta formación opositora una violación "descarada" del decreto promulgado esta misma semana por el presidente, Teodoro Obiang, para aumentar las restricciones sanitarias.

Dicho decreto, ha explicado el CPDS, reconoce "el incremento de la incidencia de la pandemia en el país y la necesidad de mantener y reforzar las medidas anteriores, entre otras, el distanciamiento social". Por este motivo, el partido ha considerado que el primer ministro ha incurrido en un "comportamiento irresponsable y temerario" por el que merece abandonar el poder.

"No es necesario reunir a miles de jóvenes desesperados para prometerles el empleo, a no ser que se trate de un mitin preelectoral", ha incidido el CPDS en su nota.

El Gobierno de Guinea Ecuatorial ha anunciado esta semana un toque de queda --entre las 19.00 y las 6.00 horas--, el cierre de establecimientos de ocio y restricciones en las conexiones aéreas para contener la expansión de la pandemia de coronavirus, a la que atribuye especial "agresividad" en estas últimas semanas.

El país africano cuenta con 138 casos activos, de los cuales 122 corresponden a los últimos siete días. El Ejecutivo ecuatoguineano ha reconocido la "agresividad del crecimiento" de la pandemia, en la que las fiestas de Navidad habrían supuesto un punto de inflexión.

Antes, según los datos oficiales, el número de casos no llegaba a los 15 de media a la semana y la tasa de positividad de las pruebas rondaba el 1,7 por ciento. Tras las fiestas, el dato de positividad ha aumentado al 2,5 por ciento y se ha confirmado el fallecimiento de al menos una persona.